Y
tenemos por aquí el disco numero 14 de esta legendaria banda de hard rock danesa
quienes últimamente han cambiado bastante su sonido musical orientándolo al
metal alternativo y abandonando ese heavy clásico que solían hacer en sus
primeros años. Este disco ejemplifica lo que digo pues los riffs de guitarra
son bastante cercanos al grunge más que al heavy o al hard rock, aunque los
temas no están nada mal. Quizás si la temática musical de estos chamacos fuera
otra, tendríamos un muy buen material de hard rock de la nueva ola que esta
surgiendo ya en esta década que agoniza. Un disco interesante, no esta nada
mal, se defiende como quien dice, pero no es lo mejor de Pretty Maids. Si
pensabas que tendrías algo cercano a sus primeros trabajos, de plano te vas a
llevar un chasco y en cambio, tendrás un disco que esta muy modernizado al
estilo actual. Es bueno saber que se encuentran aún vigentes, demuestran su
experiencia musical a pesar d ellos cambios constantes de integrantes que han
tenido con el paso de los años, pero esto demuestra que siguen en esa escala de
madurez bastante arraigada dejando en claro su importancia como una de las
bandas más respetadas del rock europeo. La producción es excelente, la
grabación es muy buena y la portada si me gustó mucho. El disco contiene 11
canciones de las cuales destacan: “Serpentine”, “Firesoul fly”, “Runaway world”,
“Slavedriver”, “Black thunder” y “Strenght of a rose”. La edición japonesa contiene
un tema extra número12 titulado “Serpentine” en versión orquestal. El disco
salió a la venta el 8 de noviembre bajo el sello de Frontiers/Ward ecords.
Calificación:
8 de 10 puntos.
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