AIRBOURNE – NO GUTS, NO GLORY – 2010
Otro clon de AC/DC, eso es lo que escuchas cuando te topas con este disco, cuyo sonido es básicamente eso: una copia bastante buena por cierto del sonido de sus compatriotas voltaicos. Así como esta muchas bandas han optado por copiar el estilo de AC/DC, lo que les ha valido bien puesto que andan intentando rescatar y renovar ese sonido de hard rock metal (O blues metal como le llaman también por ahí) bastante clásico y popular en las pasadas décadas de los setentas y ochentas y que AC/DC popularizara con su peculiar y otrora único estilo. A pesar de ello esta banda ha logrado sonar bastante bien, ya que en este su segundo trabajo los escuchamos mejor acoplados, aunque en la misma línea de su anterior disco. Definitivamente mucho que decir al respecto no hay, porque es una banda clon (para no decir irónicamente de tributo) en la que no hallamos nada nuevo ni sorprendente excepto una colección de 18 temas bastante similares entre sí, que suenan a AC/DC y que a pesar de tocar bien, no les auguro mucho futuro. Es una pena que a veces la falta de creatividad se denote marcada por la copia de estilos y tendencias ya creadas por otras bandas y que hoy ya son conocidas por esos sonidos ahora clásicos y que en su momento causaron sensación, cosa que no creo que estos chamacos vayan a lograr. Aun así el disco tiene una muy buena producción, una buena grabación, temas algo más acelerados que como los solía tocar AC/DC pero eso sí, con buen feeling y con ganas de hacer bien las cosas. Tributo, copia vil o clon bien hecho, son excelentes músicos que mejor hubieran optado por trabajar algún sonido que se peque de propio y no andar copiando otras cosas, valga la redundancia. El disco contiene 18 temas de los cuales destacan: “Born to kill”, “No way to the hard way”, “Raise the flag”, “Bottom of the well”, “It ain’t over ‘till it’s over” (No es cover ni tiene nada que ver con el Lenny Kravitz), “Armed and dangerous” y “Back on the bottle”. El disco salio a la venta el 20 de abril del 2010 bajo el sello de Roadrunner records.
Calificación: 8 de 10 puntos.
Otro clon de AC/DC, eso es lo que escuchas cuando te topas con este disco, cuyo sonido es básicamente eso: una copia bastante buena por cierto del sonido de sus compatriotas voltaicos. Así como esta muchas bandas han optado por copiar el estilo de AC/DC, lo que les ha valido bien puesto que andan intentando rescatar y renovar ese sonido de hard rock metal (O blues metal como le llaman también por ahí) bastante clásico y popular en las pasadas décadas de los setentas y ochentas y que AC/DC popularizara con su peculiar y otrora único estilo. A pesar de ello esta banda ha logrado sonar bastante bien, ya que en este su segundo trabajo los escuchamos mejor acoplados, aunque en la misma línea de su anterior disco. Definitivamente mucho que decir al respecto no hay, porque es una banda clon (para no decir irónicamente de tributo) en la que no hallamos nada nuevo ni sorprendente excepto una colección de 18 temas bastante similares entre sí, que suenan a AC/DC y que a pesar de tocar bien, no les auguro mucho futuro. Es una pena que a veces la falta de creatividad se denote marcada por la copia de estilos y tendencias ya creadas por otras bandas y que hoy ya son conocidas por esos sonidos ahora clásicos y que en su momento causaron sensación, cosa que no creo que estos chamacos vayan a lograr. Aun así el disco tiene una muy buena producción, una buena grabación, temas algo más acelerados que como los solía tocar AC/DC pero eso sí, con buen feeling y con ganas de hacer bien las cosas. Tributo, copia vil o clon bien hecho, son excelentes músicos que mejor hubieran optado por trabajar algún sonido que se peque de propio y no andar copiando otras cosas, valga la redundancia. El disco contiene 18 temas de los cuales destacan: “Born to kill”, “No way to the hard way”, “Raise the flag”, “Bottom of the well”, “It ain’t over ‘till it’s over” (No es cover ni tiene nada que ver con el Lenny Kravitz), “Armed and dangerous” y “Back on the bottle”. El disco salio a la venta el 20 de abril del 2010 bajo el sello de Roadrunner records.
Calificación: 8 de 10 puntos.
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