METALLICA - DEATH MAGNETIC – 2008
Un disco que ya tiene más de un año que salió a la venta pero que por razones de organización no había podido publicar la reseña. Desde los años de los “Load” (1996) y “Reload” (1997), pasando por algún disco sinfónico, refritos de los “Garage days” y un bastante malo “St Anger” (2003), y presionados tal vez por la aparente fidelidad de otras bandas de thrash, como sus adversarios Megadeth, Slayer, Overkill y Testament y optando por volver a sus raíces, deciden lanzar un álbum en el que muestran las dos direcciones a seguir: por un lado, lo que hacían anteriormente y por otro la evolucion, para que las nuevas generaciones los conozcan y tengan idea de lo que Metallica ha hecho en sus casi ya 30 años de trayectoria musical. El disco presenta temas muy bien arreglados, que poseen elementos de sus primeras épocas pero enfocados a los tiempos nuevos en los que el metal es más parafernalia que actitud y donde el reinado del marketing es más que evidente. Este es el primer disco en estudio para Robert Trujillo, quien en mi opinión sale sobrando en la banda, no obstante su talento en el bajo y de quien puedo opinar, es demasiado músico para ellos. James Hetfield, tiene una voz ya desgastada, pero que con su peculiar estilo da lo mejor de sí en sus interpretaciones en el disco; Lars Ulrich suena bastante estático en la batería y Kirk Hammett no da más de lo que buenamente puede dar, lo que notamos en sus conciertos en los cuales muchas veces se confunde y comete errores en la guitarra. Se nota el hastío y el cansancio y creo que estos señores ya van de salida. En lo general “Death magnetic” es un disco sólido, bien trabajado con una producción que corrió a cargo del genial Rick Rubin quien logró darle a Metallica el sonido justo que necesitaba pare este tipo de disco, pues si seguían con Bob Rock iba a ser su acabose. La banda necesitaba actualizarse y reconstruirse sobre sí mismos y lo consiguieron, logrando temas excelentes, muy trabajados y elaborados, con una buena técnica y que no dejan ver que son músicos improvisados sino que tienen y gozan de gran experiencia dentro del mundo musical en general. Los destructores del Napster, dan gala de 10 temas bastante largos con duraciones superiores a los cinco minutos cada una y bastante difíciles de digerir. No es lo mejor de Metallica, pero sí es un gran disco que te dejará satisfecho y te hará recordar aquellas épocas de antaño donde el thrash era otra cosa. Las canciones que destacan son: “That was just your life”, “The end of the line”, “The day that never comes”, “The unforgiven III”, “Suicide & redemption” y “My apocalypse”. El disco salio a la venta el 12 de septiembre del 2008 bajo el sello de Warner Bros ecords, para estados Unidos y Vertigo records, subsidiaria de Universal music para Latinoamérica y el resto del mundo.
Calificación: 8 de 10 puntos.
Un disco que ya tiene más de un año que salió a la venta pero que por razones de organización no había podido publicar la reseña. Desde los años de los “Load” (1996) y “Reload” (1997), pasando por algún disco sinfónico, refritos de los “Garage days” y un bastante malo “St Anger” (2003), y presionados tal vez por la aparente fidelidad de otras bandas de thrash, como sus adversarios Megadeth, Slayer, Overkill y Testament y optando por volver a sus raíces, deciden lanzar un álbum en el que muestran las dos direcciones a seguir: por un lado, lo que hacían anteriormente y por otro la evolucion, para que las nuevas generaciones los conozcan y tengan idea de lo que Metallica ha hecho en sus casi ya 30 años de trayectoria musical. El disco presenta temas muy bien arreglados, que poseen elementos de sus primeras épocas pero enfocados a los tiempos nuevos en los que el metal es más parafernalia que actitud y donde el reinado del marketing es más que evidente. Este es el primer disco en estudio para Robert Trujillo, quien en mi opinión sale sobrando en la banda, no obstante su talento en el bajo y de quien puedo opinar, es demasiado músico para ellos. James Hetfield, tiene una voz ya desgastada, pero que con su peculiar estilo da lo mejor de sí en sus interpretaciones en el disco; Lars Ulrich suena bastante estático en la batería y Kirk Hammett no da más de lo que buenamente puede dar, lo que notamos en sus conciertos en los cuales muchas veces se confunde y comete errores en la guitarra. Se nota el hastío y el cansancio y creo que estos señores ya van de salida. En lo general “Death magnetic” es un disco sólido, bien trabajado con una producción que corrió a cargo del genial Rick Rubin quien logró darle a Metallica el sonido justo que necesitaba pare este tipo de disco, pues si seguían con Bob Rock iba a ser su acabose. La banda necesitaba actualizarse y reconstruirse sobre sí mismos y lo consiguieron, logrando temas excelentes, muy trabajados y elaborados, con una buena técnica y que no dejan ver que son músicos improvisados sino que tienen y gozan de gran experiencia dentro del mundo musical en general. Los destructores del Napster, dan gala de 10 temas bastante largos con duraciones superiores a los cinco minutos cada una y bastante difíciles de digerir. No es lo mejor de Metallica, pero sí es un gran disco que te dejará satisfecho y te hará recordar aquellas épocas de antaño donde el thrash era otra cosa. Las canciones que destacan son: “That was just your life”, “The end of the line”, “The day that never comes”, “The unforgiven III”, “Suicide & redemption” y “My apocalypse”. El disco salio a la venta el 12 de septiembre del 2008 bajo el sello de Warner Bros ecords, para estados Unidos y Vertigo records, subsidiaria de Universal music para Latinoamérica y el resto del mundo.
Calificación: 8 de 10 puntos.
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